Segunda semana:
Justo hoy empieza mi tercera semana y quería hablaros de como han sido mis primeras dos semanas aquí en Lecce.
Empezaré con el vuelo:
Hay dos aeropuertos cerca de Lecce. Uno es en Bríndisi (el más cercano) y el otro en Bari, que fue el que cogí yo porque los vuelos suelen ser más baratos. Aún así hay que hacer escala, en mi caso en Barcelona. Desde el aeropuerto de Bari cogí un tren hasta la estación central y después otro tren directo a Lecce.
Mi plan al llegar era coger un taxi hasta el piso, pero como mi vuelo se retrasó mi casera decidió venir a recogerme a la estación y llevarme ella en coche. La verdad que tuve mucha suerte porque ya era bastante tarde y llegué bastante cansada de estar todo el día viajando, así que agradecí mucho el gesto.
El piso:
Mi casera fue un amor, cuando vino a recogerme me trajo un cobertor para la cama de su casa porque esa semana había empezado a hacer frío por las noches y también me compró una botella de agua y me la dejó en la nevera porque sabía que cuando llegara estarían cerrados los supermercados.
Obviamente después de eso y de que me fuera a buscar cuando me preguntó si me gustaba el piso le habría dicho que me encantaba aunque fuera lo peor del mundo, pero no fue el caso para nada. El piso es increíble, está cerca del centro y además con un supermercado justo abajo. Por poner pegas diría que está un poco lejos del trabajo, pero se puede ir andando perfectamente y así me ahorro el gimnasio, que aquí además es bastante caro.
La empresa:
Me encanta mi empresa. Los compañeros y la jefa son geniales y aprendo mucho, pero sin que resulte agobiante. También estoy mejorando mi italiano y espero que al final de la estancia me pueda sacar la certificación oficial de idioma sin mucho esfuerzo.
Hay muchas cosas chulas que no son realmente laborales en esta empresa que me encantan, como que a veces está el perro de la jefa haciéndonos compañía, que los compañeros a veces nos traen comidas típicas de la zona para que las probemos, o que a la hora del café estemos todos juntos y nos recomienden sitios y cosas que hacer por aquí
La gente:
No voy a mentir, hice trampa con esto. Contacté con gente que también iba a vivir en Lecce antes de venir así que al llegar ya estaba en dos grupos de WhatsApp (uno de Erasmus internacionales y otro de españoles) y conocía a otros dos chicos que estarían en mi empresa, así que me fue más sencillo empezar a quedar con gente.
A la gente que se vaya de Erasmus a cualquier ciudad le recomiendo buscar la ESN local antes de ir. Se puede contactar con ellos por redes sociales o también en Erasmusu.com, y suelen formar grupos de WhatsApp el verano antes que sirven para conocer a la gente y también para intercambiar información, encontrar pisos y descubrir planes por la zona.
Al llegar septiembre esta asociación empieza a hacer eventos todas las semanas y son una buena ocasión para conocer a otros erasmus.
Conclusión
Creo que he tenido bastante suerte en general con todo. Este no es mi primer Erasmus y desde que terminé el anterior quería volver a vivir la experiencia de estar en otro país. Aunque al principio tenía algo de miedo por tener que hacer las prácticas en otro idioma y estar de Erasmus trabajando y haciendo el proyecto de fin de ciclo al mismo tiempo he de decir que no me arrepiento para nada de mi decisión y que sólo espero que el tiempo no pase demasiado rápido y que cuando me dé cuenta me tenga que volver.
Avión Barcelona-Bari
Anfiteatro
Ordenadores antiguos de cuando se formó la empresa en los 80
Pizza en la Rosetta (3,50€ la margarita!)
Porta di San Biagio
San Cataldo